¿Estás pagando tu casa? Ojo si pensás alquilarla (la letra chica te puede complicar)

¿Vas a alquilar una casa que aún estás pagando? Antes de decidir, revisá bien el contrato: hay cláusulas que pueden traerte problemas

¿Estás pagando tu casa? Ojo si pensás alquilarla (la letra chica te puede complicar) - facundopolo.com

Alquilar una casa que todavía estás pagando no es algo tan raro como parece. De hecho, cada vez más personas lo hacen como forma de adaptarse a nuevas realidades o cuidar su economía. Pero no todo depende de la voluntad: las condiciones del crédito y los detalles legales son clave.

En esta guía, te contamos lo que necesitás saber para tomar una decisión informada, segura… y sin sorpresas.

Planes que cambian, decisiones que cuestan

A veces no se trata solo de números. Un cambio de trabajo, una mudanza inesperada, una separación o simplemente la necesidad de alivianar las finanzas. Las razones para alquilar una casa que todavía se está pagando pueden ser muchas, y todas válidas.

Y es que, en momentos de incertidumbre, tener una propiedad vacía puede ser difícil de sostener. Entonces surge la duda: ¿puedo alquilar mi casa aunque todavía la esté pagando al banco?

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¿Es legal alquilar una propiedad con hipoteca?

La respuesta corta es sí. En Argentina, la ley no impide que alquiles una vivienda hipotecada. Pero -y es un “pero” importante- eso no significa que puedas hacerlo siempre, bajo cualquier condición.

Porque más allá de lo que dice la ley, lo que realmente manda en estos casos es lo que firmaste con el banco. Y también, si el crédito que obtuviste incluye subsidios del Estado.

Situaciones en las que no podés alquilar tu casa (al menos por ahora)

● Créditos con subsidio estatal: el hogar no se alquila

Muchos créditos con ayuda del Estado -como los de Procrear u otros programas similares- exigen que la casa sea tu vivienda única y permanente. Eso significa que no podés alquilarla mientras dure ese compromiso.

¿Por qué? Porque el subsidio fue pensado para que vivas ahí, no para que la uses como inversión. Saltarte esa regla puede tener consecuencias serias, como perder el beneficio.

Antes de decidir algo, revisá bien el contrato. Y si hay dudas, no te la juegues: hablá con un profesional o llamá directamente al organismo que te otorgó el crédito.

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● Cláusulas del banco: esas líneas chiquitas que pasan desapercibidas... hasta que complican todo

Es habitual que algunos bancos incorporen cláusulas que limitan o directamente prohíben alquilar la propiedad mientras el crédito esté vigente.

Esto es bastante común en préstamos con beneficios especiales o cuando se trata de la compra de una primera vivienda. ¿La lógica detrás? El banco quiere asegurarse de que seas vos -el titular del crédito- quien realmente viva en el inmueble.

Y si llegás a alquilarla sin avisar, podrían considerarlo un incumplimiento. Nadie quiere recibir una carta documento por eso, ¿no?

¿Y si mi contrato no dice nada?

Entonces estás del otro lado. Si no hay subsidios que lo impidan y el contrato con el banco no menciona nada sobre restricciones para alquilar, podés hacerlo legalmente.

Eso sí: el compromiso con el banco sigue siendo 100% tuyo. Si el inquilino se atrasa o deja de pagar, el que tiene que seguir cumpliendo sos vos.

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¿Querés alquilar tu casa hipotecada? Hacelo bien desde el principio

Alquilar una vivienda en estas condiciones no tiene por qué ser un dolor de cabeza. Con algo de previsión y orden, puede ser una solución que te dé aire. Acá van algunos consejos prácticos:

Siempre, siempre, firmá un contrato

Nada de confiar “porque es amigo” o “porque es de la familia”. Un contrato bien hecho te da respaldo legal, incluso si las cosas se complican.

Que el alquiler cubra la cuota… y un poco más

Hacé los números con calma. Sumá expensas, impuestos, seguro del hogar. Y pensá en escenarios reales: ¿Qué pasa si el inquilino se va antes? ¿Podés cubrir esa brecha?

Pedí una garantía que te dé tranquilidad

Una garantía propietaria, un seguro de caución… lo que elijas, que sea sólido. Sobre todo si estás dependiendo del alquiler para no atrasarte con el banco.

No descuides la propiedad

Aunque no vivas ahí, el inmueble sigue siendo garantía del crédito. Mantenelo en buen estado, hacé visitas periódicas si podés y asegurate de que todo esté al día.

Asesorate antes de firmar

Un profesional de confianza puede ayudarte a interpretar el contrato hipotecario y a hacer las cosas bien desde el comienzo. A veces, una consulta a tiempo te evita muchos dolores de cabeza.

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¿También tenés estas dudas? 

1. ¿Tengo que avisarle al banco si voy a alquilar la propiedad?

Depende. Sí, ya sé, no es la respuesta más emocionante... pero es así. Si el crédito no pone trabas ni menciona nada sobre alquilar, podés avanzar tranquilo. Ahora, si dice que tiene que ser tu vivienda habitual, ahí cambia la cosa. En ese caso, mejor hablar con el banco y dejar todo por escrito.

2. ¿Qué pasa si el inquilino deja de pagar y yo no puedo afrontar la cuota?

Una pesadilla, ¿no? Pero pasa. Lo importante es saber que el compromiso con el banco sigue siendo tuyo, no importa qué haga el inquilino. Si él no paga, te toca a vos cubrir la cuota igual. Por eso, más vale prevenir: pedí una garantía seria y hacé un contrato con todas las de la ley. 

3. ¿Puedo alquilar una parte de la casa y vivir en el resto?

¡Claro que sí! Es una jugada bastante común, sobre todo si querés achicar gastos sin mudarte. Eso sí, tené en cuenta lo que diga tu crédito: algunos exigen ocupación total. Y ojo con modificar cosas que puedan afectar la garantía hipotecaria.

4. ¿Puedo ofrecer la propiedad en alquiler temporario?

Mmm… depende de varias cosas. Hay bancos que no lo permiten porque lo ven como uso comercial. Y por otro lado, en algunas ciudades hay reglas bastante estrictas con este tipo de alquileres.

5. ¿Qué pasa si quiero vender la casa mientras está alquilada?

Se puede, sí. Incluso si todavía estás pagando el crédito. Eso sí, vas a necesitar el ok del banco. Y muy importante: respetar el contrato de alquiler que ya está en marcha. El comprador se queda con la casa, pero también con el inquilino hasta que venza el contrato.